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Sauces, ramas de sauce y mimbre.

​Es un poco lo mismo, pero por lo que hemos aprendido, el "sauce" debería ser la planta madre, la rama su fruto, pero todavía crudo, sin trabajar, el "mimbre" descortezado y preparado, un producto semiacabado. Lo que sí se sabe es que existen muchas variedades de sauces (sin contar los cruces) y no todos sirven para tejer, pues otros son imposibles de utilizar para atar.

Sauces blancos
Nuestros sauces blancos

Los sauces blancos son aptos para tejer.
Son de color blanco porque en los meses de invierno se colocan con los "pies en el agua",
posteriormente, en el mes de mayo, en plena brotación, por tanto rica en savia, serán descortezadas, secadas al calor del sol y almacenadas.
Finalmente se seleccionarán en altura, desde veinte cm hasta 300 cm, con un intervalo regular cada 20 cm.

Sauces rojos
Nuestros sauces rojos

Los sauces rojos son aptos para tejer.
Rojos porque a diferencia de los sauces blancos, se secan con la piel, posteriormente se sumergen en grandes tinas, se hierven durante varias horas y luego se descortezan, el tanino les da este hermoso color natural.
Esta operación permite descortezar los sauces no sólo en el mes de mayo sino durante todo el año.
También se seleccionan en altura, desde 80 cm hasta 300 cm, con intervalos de 20 cm.

Sauces con piel
Nuestros sauces con piel

Los sauces desollados son aptos para tejer.
Sin descortezar, son un poco más difíciles de utilizar.
Los sauces tejidos con cuero le dan al producto terminado un encanto diferente, rústico y muy bonito.
NOTA: A diferencia de los sauces pelados, los sauces pelados huelen muy bien.
También se seleccionan en altura, desde 80 cm hasta 300 cm, con intervalos de 20 cm.

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